La Asociación Española de Protocolo está de cumpleaños. Celebra su veinte aniversario y cuyo acto central es el Foro a celebrar este sábado día 24 de noviembre en la Casa Encendida en la capital madrileña y con que el que además se lleva a cabo la entrega de medallas a profesionales del protocolo como reconocimiento a su carrera.

En dos décadas han pasado muchas cosas y en ese tiempo, nuestra profesión ha sufrido una importante transformación, tanto social como académica. La AEP nació para defender los intereses de todos aquellos que trabajan en este ámbito y desde su creación, ha estado apoyando cuantas iniciativas podían propiciar una mejora para la profesión, ocupándose de incentivar estímulos y mejorar la formación. Su singladura ha estado y sigue estando al lado de aquellos estamentos e instituciones que trabajan en pro de nuestro colectivo. La AEP fue fruto de una feliz iniciativa promovida por un grupo de personas con alta sensibilidad por las cuestiones de Protocolo y disciplinas auxiliares.

Surgió cuando esto del Protocolo era prácticamente un oficio vocacional y cuando los profesionales apenas tenían foros donde formarse académicamente. Hoy en día, Protocolo es grado universitario y además, para evolucionar con los tiempos, Protocolo es organización de eventos.

Hasta Juan Ángel Gato, la presidencia de la Asociación Española de Protocolo ha tenido otras personas que arrimaron el hombro para hacer brotar, consolidar y fortalecer esta organización profesional. Hablamos de nombre como Inmaculada Pallares, María Sánchez, Ana Palacios, Cristina de la Vega y por supuesto, María Carretero, nuestra añorada María quien la AEP dedicará una distinción especial en su recuerdo como “Medalla a la Excelencia Profesional María Carretero” y que supondrá todo un honor para aquellos profesionales que a partir de ahora reciban esta meritoria.

En la sociedad actual, en constante evolución, el papel de la AEP es primordial, pues tiene que convertirse en portavoz reconocido ante sus distintos estamentos para hacer llegar las inquietudes, reivindicaciones y la problemática de todos sus profesionales y por ello estos veinte años que sirvan cono acicate para seguir trabajando en ese futuro inmediato y que permita continuar la expansión y consolidación de esta bendita actividad profesional, todavía denostada por muchos ignorantes que aún no valoran lo que es y para qué sirve esto del protocolo.

Prueba de ello, es la Declaración Institucional que la Asociación hizo pública hace unos meses y donde ponía de manifiesto la relevancia de esta profesión y la necesidad de contar con profesionales en todos los estamentos públicos y privados de la sociedad.