El salón de los Espejos del palacio de San Telmo ha sido el escenario donde hace unas horas ha tomado posesión el nuevo Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía.

Un gobierno de coalición entre el PSOE e IU consecuencia del resultado electoral del pasado mes de marzo y de los acuerdos políticos derivados de éste que han llevado a una reestructuración del Gobierno en once Consejerías, que se plasman en tres decretos, 2, 3 y 4/2012 y, que según dicen sus promotores, se basan en el pragmatismo, en la definición de grandes áreas de gestión y en la transversalidad.

De este modo, la estructura queda como sigue:

1. Presidente
2. Vicepresidente
3. Consejería de la Presidencia e Igualdad.
4. Consejería de Administración Local y Relaciones Institucionales. (La ocupa el Vicepresidente)
5. Consejería de Justicia e Interior.
6. Consejería de Educación.
7. Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo.
8. Consejería de Hacienda y Administración Pública.
9. Consejería de Fomento y Vivienda.
10. Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente.
11. Consejería de Salud y Bienestar Social.
12. Consejería de Turismo y Comercio.
13. Consejería de Cultura y Deporte.

Esta estructura, fruto de los compromisos adquiridos, nos llevará a la reducción de la estructura administrativa, especialmente de la periférica. Ya no habrá un delegado provincial por Consejería sino que, según ha anunciado el Gobierno, serán seis los representantes en cada una de las provincias aunque eso se irá conociendo en los próximos días.

Con todo esto, es preciso indicar que los principios que rigen las precedencias y ordenación de autoridades y corporaciones en la Junta de Andalucía, el Decreto 77/2002 de 27 de febrero, deberán extremarse y cuidar sobre todo cuando a nivel provincial se organicen los actos ya que el empeño por ocupar espacio público y mediático, puede llevarnos a los responsables de protocolo a tener más de un problema.

Y como ejemplo me pregunto si el vicepresidente, una figura creada en base a las competencias que se definen en la Ley 6/2006, de 24 de octubre, de Gobierno será la persona que le sustituirá en determinadas funciones. Me planteo si este vicepresidente, titular también de la Consejería de Administración Local y Relaciones Institucionales, siempre estará por delante de la titular de la Consejería de la Presidencia e Igualdad, incluso cuando los actos organizados sean los propios de esa Consejería.

Nuevo Gobierno de la Junta de Andalucía

Y todo lo comento porque según nos fijemos en los contenidos de los citados Decretos o en el dossier del Gobierno que publica hoy mismo la web oficial la respuesta es diferente.

Según publicó ayer Diario de Sevilla, un dirigente político ha dicho que “el protocolo es algo que se puede aprender muy rápido”. Bien, pues esperemos que así sea y que no sólo se instruyan en una parte. Aunque lo mejor sin duda será que dejen esto en mano de los profesionales del Protocolo, de los que esperamos se rodeen, unos profesionales que deberán aprender “al dedillo” la distribución de competencias del Decreto del Presidente 3/2012.